NOVENA BEATA MADRE GENOVEVA TORRES MORALES
Beata Genoveva Torres Morales
"ANGEL DE LA SOLEDAD"
NOVENA
ORACION INICIAL (para todos los días)
Oh Dios, que concediste a la Beata Genoveva, religiosa, gracias innumerables, escogiéndola como instrumento fiel para combatir la soledad en que viven muchos seres humanos: haz que yo sepa también convertir todos los momentos y circunstancias de mi vida en ocasión de amarte, de servir con alegría y sencillez a la Iglesia y al prójimo, iluminando los caminos del mundo con la luz de la fe y del amor. Dígnate otorgar la pronta canonización de la Beata Genoveva, y concédeme con su intercesión el favor que te pido (pídase). Por Jesucristo Nuestro Señor. Así sea.
Se medita a continuación sobre el pensamiento tomado para cada día de los escritos de la Madre, y se reza la oración correspondiente
ORACION FINAL (para todos los días)
Oh Dios, rico en misericordia, que por medio de la Beata Genoveva, virgen, inválida en su cuerpo, has manifestado la grandeza del amor del Corazón de Cristo, principalmente hacia quienes viven en soledad, por su intercesión, concédenos imitar sus ejemplos para poder seguir fielmente a tu Hijo Jesucristo. Él, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. Amén.
PRIMER DÍA
"En esto conocemos que amamos a los hijos de Dios, si amamos a Dios y cumplimos sus mandamientos"
(I Jn 5, 2-3).
"El camino de la virtud es el camino del vencimiento y, por consiguiente, el del sufrimiento. Todo lo vence el amor, y con gusto o sin él trabajamos. Que la antorcha de la fe sea nuestro faro, nuestra guía el amor a Dios y al prójimo, y la esperanza nuestra fortaleza".
(De los escritos de la Beata Madre Genoveva)
Oración: Señor, Padre Santo, que para nuestro bien espiritual nos mandaste dominar nuestro cuerpo mediante la austeridad, ayúdanos a librarnos de la seducción del pecado y a entregarnos al cumplimiento filial de tu santa ley.
Por Jesucristo nuestro Señor.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)
SEGUNDO DÍA
"El que no coge mi cruz y me sigue no es digno de Mí. El que encuentre su vida la perderá, y el que pierda su vida por Mí, la encontrará"
(Mt 10, 38-39).
"La vida espiritual está en cumplir nuestros deberes con perfección, y para estar unida con Dios basta el conformarse con su santa voluntad; y tanto estaré más unida cuanto más renuncio a mis pobres quereres por abrazarme en la cruz de Cristo en su querer, cueste lo que cueste".
(De los escritos de la Beata Madre Genoveva)
Oración: Señor Dios, Creador de todas las cosas, que mandaste a los hombres cumplir los deberes de trabajo; haz que, por tu misericordia, sirvan nuestras tareas para el progreso humano y para la extensión del Reino de Cristo.
Por Jesucristo nuestro Señor.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)
TERCER DÍA
"Y sabed que yo estoy con vosotros todos los días hasta el final del mundo"
(Mt 28, 30).
"¡Tenga confianza y acuda al Sagrario! ¡Él está solo!, ¿por qué no acompañarlo? Y sufre, ¿por qué no sufrir nosotros? Y disimula, ¿por qué no nosotros? Y siempre perdonando y pidiendo y ofreciéndose a su Eterno Padre, ¿y por qué no nosotros? Y siempre amando, ¿y por qué no nosotros? ¡Buen ánimo y a ser todos de Él!".
(De los escritos de la Beata Madre Genoveva)
Oración: Oh Dios, que en el sacramento de la Eucaristía nos dejaste el memorial de tu pasión; te pedimos nos concedas venerar de tal modo los sagrados misterios de tu Cuerpo y de tu Sangre, que experimentemos constantemente en nosotros el fruto de tu redención.
Tú, que vives y reinas por los siglos de los siglos.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)
CUARTO DÍA
"Voy a enviarte un ángel por delante para que te cuide en el camino y te lleve al lugar que he preparado" (Ex 23, 20).
"El Ángel de la Guarda es el mejor amigo de mi alma. A Él acudiré en mis necesidades de alma y cuerpo, pues en mis tristezas y padecimientos me fortalecerá para caminar hacia Dios. El Ángel siempre a mi lado. Yo le daré gusto viviendo en paz".
(De los escritos de la Beata Madre Genoveva)
Oración: Oh Dios, que en tu providencia amorosa te has dignado enviar para nuestra custodia a tus santos ángeles; concédenos, atento a nuestras súplicas, vernos siempre defendidos por su protección y gozar eternamente de su compañía.
Por Jesucristo nuestro Señor.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)
QUINTO DÍA
"Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador"
(Lc 1, 46-47).
"¡Cuánto debo yo a la Santísima Virgen! A su nombre se fundó la primera casa, bajo sus auspicios. ¡Cuántas gracias le debo! ¡Cuántos recuerdos, Madre querida! No me dejes; no me falte tu amparo en toda contrariedad y vaivenes de esta vida de miseria. El Instituto es tuyo. Como tal, espero que seáis el timón que lleva la nave al puerto".
(De los escritos de la Beata Madre Genoveva)
Oración: Dios todopoderoso, concede a los fieles que se alegran bajo la protección de la Virgen María, verse libres, por su intercesión, de todos los males de este mundo y alcanzar las alegrías del cielo.
Por Jesucristo nuestro Señor.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)
SEXTO DÍA
"Revestíos, pues, como elegidos de Dios, santos y amados, de entrañas de misericordia, de bondad, humildad, mansedumbre, paciencia, soportándoos unos a otros y perdonándoos mutuamente, si alguno tiene queja contra otro" (Col 3, 12-13).
"Siempre he visto con pena las desavenencias, pareciéndome que el Señor no puede estar contento de ellas; pues que todos somos hijos del mismo Padre. Esta es la vida: sufrir de todos y no hacer sufrir a nadie".
(De los escritos de la Beata Madre Genoveva)
Oración: Oh Dios, unidad suprema y amor verdadero; concede a tus hijos un solo corazón y un solo espíritu, para que vivan en concordia y para que la Iglesia, cimentada en la verdad, pueda mantenerse en la unidad perfecta.
Por Jesucristo nuestro Señor.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)
SEPTIMO DÍA
"Lo que hacéis hacedlo con toda el alma, como para servir al Señor y no a los hombres"
(Col 3, 23).
"Quiere el Señor almas grandes, y no lo son las que guardan alguna partecita de su propio corazón. Entonces somos aves de rapiña. No acepta el Señor la ofrenda de un corazón partido, ni puede decirse que ama el que teme dar aquello que el Señor quiera pedirle".
(De los escritos de la Beata Madre Genoveva)
Oración: Oh Dios, Padre de todos los dones, de quien viene cuanto somos y tenemos; enséñanos a reconocer los beneficios de tu amor, y a amarte con todas las fuerzas de nuestro corazón.
Por Jesucristo nuestro Señor.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)
OCTAVO DÍA
"Inclinaos, pues, bajo la mano poderosa de Dios, para que a su tiempo os levante. Descargad en Él todo vuestro agobio, que Él se interesa por vosotros"
(I P 5, 6-7).
"Vivamos en manos de Dios, como la pelota en manos de un niño juguetón, que, por más lejos que la eche, nunca la pierde de vista. Mi paz la debo cifrar en estar pendiente de lo que Dios quiera de mí, sin mirar mis gustos y quereres. Sólo Dios basta en todo".
(De los escritos de la Beata Madre Genoveva)
Oración: Oh Dios, que has preparado tu Reino para los humildes y sencillos, concédenos la gracia de seguir confiadamente el camino de la conformidad en todo con tu santa voluntad, para que nos sea revelada tu gloria eterna.
Por Jesucristo nuestro Señor.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)
NOVENO DÍA
"Me alegro de sufrir por vosotros: así completo en mi carne los dolores de Cristo, sufriendo por su cuerpo que es la Iglesia"
(Col 1, 24).
"En medio de mis padecimientos morales y físicos, no cesará la música interior de mi alma, de alabar a Dios con actos de virtudes ofreciéndome a Él por amor. Siempre la enfermedad es un aliciente más para acudir a Dios, no para sanar sino para estar conforme en lo que Dios manda".
(De los escritos de la Beata Madre Genoveva)
Oración: Dios y Señor nuestro, salvación eterna de cuantos creen en Ti, escucha las oraciones que te dirigimos por tus hijos enfermos; alívialos con el auxilio de tu misericordia, para que, recuperada la salud, puedan darte gracias en tu Iglesia.
Por Jesucristo nuestro Señor.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria
La Beata Genoveva, hubo de caminar siempre apoyada en muletas, pero eso no le impidió discernir y cumplir, con paso firme, la voluntad de Dios.
Demostró una fortaleza heroica, tanto en su actividad humana como en su labor apostólica. Muestra que la limitación física no es impedimento alguno para realizarse como persona y para vivir en plenitud la vocación y misión cristiana.
Mujer humilde, tanto por su origen como por su cultura, poseyó la ciencia del amor divino, aprendido en su intensa devoción al Corazón de Jesucristo.
En su debilidad se manifestó la fuerza de Dios. Ella siguió el ejemplo de María: como la humilde muchacha de Nazaret pronunció también su "fiat" confiando en el poder del Señor y recibiendo de Él la ayuda necesaria para responder generosamente a la vocación religiosa de fundar un nuevo Instituto. (Juan Pablo II)
NOVENA BREVE ESPÍRITU SANTO
SIETE VENTAJAS PRECIOSAS PARA EL QUE HA HECHO LA PROMESA DE PROPAGAR LA DEVOCIÓN AL ESPÍRITU SANTO:
1. Se crea un lazo de amor entre nuestra alma y la Tercera Persona de la Santísima Trinidad.
2. Un aumento notable de todas nuestras devociones, especialmente a la Sagrada Eucaristía, al Corazón de Jesús y a la Santísima Virgen.
3. Una seguridad de recibir en el alma más inspiraciones del Espíritu Santo y la fuerza para ponerlas en práctica.
4. Procurar, de una manera excelente, la gloria de Dios, trabajando cada día en hacer conocer y amar al Santificador de las almas.
5. Trabajar muy especialmente por el advenimiento del Reinado de Dios en el mundo por la acción del Espíritu vivificante.
6. Ser verdadera y prácticamente Apóstol del Espíritu Santo.
7. Atraer sobre el alma auxilios espirituales del Espíritu Santo; más intima unión con Dios por medio del Santificador; mayor progreso en la oración mental; más consuelo, y hasta alegría, en la hora de la muerte después de tan sublime apostolado.
(El invocar a menudo al Espíritu Santo es prenda segura de acierto y ayuda en nuestros problemas y necesidades espirituales y temporales.)
La novena del Espíritu Santo es de suma importancia para todo cristiano ya que fue la primera que celebraron los Apóstoles con la Virgen María en el Cenáculo. Allí aguardaron con recogimiento y oración su venida y recibieron sus abundantes y maravillosos dones.
ORACIONES PARA TODOS LOS DÍAS
Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos la llama de tu amor. Oh, Dios, que con la luz del Espíritu Santo iluminas los corazones de tus fieles, concédenos que guiados por el mismo Espíritu, disfrutemos de lo que es recto y nos gocemos con su consuelo celestial.